Pizza casera de chorizo
La pizza casera de chorizo y tomate, es un clásico en Italia. Allí normalmente usan el pepperoni, que es un tipo de salami.
Pero es muy difícil de conseguir. En España, yo solo lo encuentro en los supermercados Alcampo. Así que normalmente, uso chorizo y salen riquísimas. También podéis usar salchichas, jamón o bacón, es lo bueno de la pizza que podemos tirar de despensa. Una de las cosas más importantes para este tipo de pizza es la salsa de tomate. Hay infinidad de recetas, yo os propongo la que se hacía en mi casa de toda la vida. Así que sin más veamos el paso a paso; los utensilios que necesitamos en esta ocasión son:
1 batidora eléctrica tipo minipimer
1 cuchara de madera
1 tabla de cortar
1 cuchillo afilado
1 molde para pizza
Y ahora la lista de ingredientes:
1 bote de tomate natural triturado de 800 gr
1 cebolla mediana
4 dientes de ajo
1 cucharada de azúcar blanco
Orégano, albahaca, sal y pimienta negra
1 hoja de laurel
3 cucharadas de aceite de oliva
1 base de pizza
125 gr de queso rallado o mozzarella
80 gr chorizo entero o a rebanadas tipo ibérico
Lo primero, si tenemos preparada nuestra base de pizza tal como vimos. Es sacarla del congelador media hora para que se haga blandita.
Respecto al tomate podéis usar natural o de bote, sale igual de bueno. Yo prefiero el de bote porque me facilita el trabajo. Suelo comprar el de marca blanca de Mercadona (el bote grande) que cuesta menos de un euro y no tiene tanta agua como otros. Veamos los pasos a seguir para la preparación de la salsa:
Cortamos la cebolla en rebanadas, de la forma que vimos en el artículo de la pizza de cebolla, para evitar llorar. Y troceamos también los ajos.
A continuación ponemos la sartén con 2 cucharadas del aceite a fuego medio y echamos la cebolla. Le damos unas vueltas hasta que se dore un poco.
Entonces añadimos el ajo y las especias: orégano, albahaca, pimienta negra y el laurel. Pondremos también un poco de sal.
Doramos un poco el conjunto, no mucho solo unos 5 minutos. Siempre vigilando que no se quemen las especias.
Ponemos el tomate, añadimos el azúcar y removemos bien. Este paso es para quitarle la acidez al tomate y de paso le damos un toque de dulzura muy especial. Dejamos cocer cinco minutos más, removiendo la mezcla.
Retiramos la hoja de laurel y usamos la batidora para tamizar la salsa, sin quitar del fuego. Si no disponemos de una batidora tipo minipimer se puede poner la mezcla en una licuadora.
Dejaremos en el fuego al mínimo mientras se reduce el agua del tomate. Observareis que hace burbujitas, es normal. El resultado será una salsa espesa. Iremos probando el punto de sal y si es necesario añadiremos un poco más. La salsa de tomate habrá tomado un color rojo brillante, esto es debido a la cebolla que es capaz de aclarar la salsa cuando se tritura.
Ahora precalentamos el horno a 220º mientras untamos con el aceite restante el molde para pizzas. Y colocamos nuestra base en él. Si hemos usado chorizo entero, en este momento lo cortamos a rebanadas finas.
Con ayuda de una cuchara extendemos la salsa por la base de pizza. Si sobra tomate lo guardamos para otra ocasión o lo usamos para preparar pasta. También se puede congelar en un recipiente bien hermético.
Repartimos el queso por encima y añadimos un poco más de orégano. Encima de todo esto colocamos el chorizo. Horneamos a 170º en altura media durante unos 10 minutos. Si os gusta muy crujiente dejarla más rato, a gusto de cada cual. Si os gusta el picante, al sacarla le podemos añadir un poco de salsa tabasco. Como os comenté yo compro la marca blanca de Mercadona, que es más barata que la original y pica mucho.
Como colofón se puede poner un huevo frito en el medio de la pizza queda muy bien, pero esto también lo dejo a vuestra elección. Ya que estamos con espíritu italiano….Buon appetito!
Ese tomate natural es un espectaculo, enhorabuena.
ResponderEliminarMuchas gracias Pizzero, yo suelo hacer cantidad y así guardo un poco para ponerlo en los spaghetti otro día, salen muy buenos y te ahorras un día de cocina jjj
ResponderEliminarBsos